viernes, 28 de julio de 2017

LA VIDA IRREVERSIBLE

Estructuras disipativas
Clara Janés
Tusquets. Barcelona, 2017
122 páginas. 13 euros

La noche de la pantera
Clara Janés
Fotografías de Adriana Veyrat
Vaso Roto. Madrid, 2017
60 páginas. 18 euros

Una estrella de puntas infinitas. En torno a Salomón y El Cantar de los cantares
Clara Janés
Vaso Roto. Madrid, 2017

64 páginas. 12 euros



La escritura de Clara Janés (Barcelona, 1940) es fruto de una cosmovisión asentada en diferentes formas artísticas, estéticas, científicas y de pensamiento, donde el misticismo y el erotismo son elementos decisivos de aproximación al conocimiento. La trama de sus libros se teje con una extraordinaria cantidad de hilos que, yuxtapuestos, dibujan la totalidad de su universo poético. De algunas de estas vías de creación dan cuenta sus libros más recientes.

               
   Sobre los enigmas de la escritura versa su discurso de ingreso en la Real Academia Española. Una estrella de puntas infinitas. En torno a Salomón y el Cantar de los cantares, es una meditación acerca del poema bíblico a través de cuatro figuras esenciales, Fray Luis de León, Arias Montano, San Juan de la Cruz y Santa Teresa de Jesús, donde se reflexiona sobre ese “estado alterado de conciencia” consustancial a la sensibilidad de los místicos. Por una vía erótica y orientalizante discurren los cantos de la suite poética La noche de la pantera, un intertexto de poemas e imágenes fotográficas de Adriana Veyrat, más la lectura final que, en el CD adjunto, la poeta recita acompañada por la música de Aran Khachaturian. Inspirado en una canción popular iraní, cuenta la historia de Mina, el amor de una pantera que la visita cada noche. Los celosos hombres del pueblo deciden matar a la pantera, que huye al bosque seguida por la chica, perdiéndose ambos en la noche. Los poemas son la continuación de esa canción erótica y mística en la frontera incierta del amor y de la muerte. Un texto apasionado en el éxtasis indecible de la agonía. Un amor cósmico en el que “reverberan los rugidos de plata”, esos que sacuden y “ensanchan la noche” del universo mítico del que nace este poema del deseo.

               
El hilo científico alcanza altura en Estructuras disipativas, término con el que el físico Ilya Prigogine definió el ordenado modo de creación que surge del caos. De esas oscilaciones dinámicas amplificadas y determinadas por las interacciones con el medio, nace este libro definitivo. Las citas, referencias y homenajes, la iconicidad textual, hace de este libro una constelación de elementos, diversos y distantes, capaces de tensar la flecha de un tiempo y un espacio que se pliegan y se despliegan: “fuera del propio ser / queda la realidad, / que está en el tiempo, / y el movimiento es su fantasía”. La quietud referida en sus libros, es ahora “el punto microscópico / del movimiento / elevado al infinito”. El poema se hace así “abrazo abierto”, un proceso indetenible de apertura al movimiento del ser y del universo, ese “tensar el arco” que sostiene la “danza” irreversible del vivir. Es la integradora duración extendida de poemas en los que “se abre un camino / que no necesita pasos, / puro fluir en esa hora / del ahora”, un lugar donde será posible que se “empiece a contar / los números del alma”. Un orden en el caos donde encontrar, frente al misterio, una íntima y transparente realidad.

Esta reseña sobre los libros recientemente publicados por Clara Janés, fue publicada en Babelia - El País, el 16 de julio de 2017.


MÁS ALLÁ DE LAS PALABRAS

Historial
Marta Agudo
Calambur. Barcelona, 2017
87 páginas. 10 euros



Cuesta creer que el padecimiento sea poético, pero Historial de Marta Agudo (Madrid, 1971) es una poderosa reflexión sobre la enfermedad que da forma y textura poética al dolor situándose justo en la frontera entre la vida y la muerte: “si vivir ya implica morir, para qué estos sorbos de nada precedida”. El libro de Agudo -autora de Fragmento (2004), 28010 (2011) y coeditora junto a Carlos Jiménez Arribas de Campo abierto. Antología del poema en prosa en España (1990-2005) (DVD, 2005)- crea una red de “nódulos de conciencia” que, enlazados entre sí, procesan los poemas a través de “rutas que se solapan” en un “fluir que congrega palabras”, en una “sintaxis flexible como el tránsito de la escritura a lo póstumo”.

El lenguaje libera al poema de la tiranía semántica de la enfermedad, se rebela contra la imposibilidad de dar cuenta del daño. El sujeto sabe que “De los otros, no de la memoria viene la muerte”, y por eso va y viene de la primera a la tercera persona, legítimamente “en el lapso entre una y otra”. Un sujeto que se sabe objeto y encuentra su lugar en un “mientras” que guía y pauta la lectura, difuminados el “antes” y el “ahora”. Por eso la “mirada ancha” sobre una realidad rota, la dilatación del versículo y la extensión del poema en prosa, la “fragmentación integrada” de este poema único y suspendido en su casi irracional, pero objetiva, certeza metafórica, en la carga expresionista de imágenes crecidas en la falla y el desgaste “que se gesta a partir de la excepción”.

Historial, expediente, un posible diario, una bitácora, las huellas de un guión que abre el espacio clausurado de la enfermedad. Hablar de ello así, abiertamente, es un acto político, pues la escritura se hace “nudo de resistencia”, consciente de “Ser culpable de vida”. Tan íntimo y conmovedor como estremecedor y extremo, este libro nos abre la posibilidad de alcanzar eso que está más allá de cualquier palabra.

Esta reseña de "Historial" de Marta Agudo, fue publicada en Babelia - El País, el sábado 22 de julio de 2017.


jueves, 8 de junio de 2017

TODO EL PESO DEL MUNDO

Mano invisible
Adam Zagajewski
Traducción del polaco de Xavier Farré
Acantilado. Barcelona, 2012
95 páginas. 15 euros

               
           De nuevo Adam Zagajewski (Lvov, 1945) consigue en Mano invisible conferir presencia a lo que a la presencia escapa, hacer cercano lo lejano dando configuración y ritmo a una lengua de lo inalcanzable, observado en el tiempo y el espacio en que se instala. Este movimiento tiene lugar en el poema, que convierte en figura y en gesto lo perdido, otorgándole un aquí y un ahora ofrecidos a la mirada y al oído del lector: “un poema es como una sala donde las caras se difuminan / en la niebla dorada de los focos, donde el salvaje / murmullo de la multitud airada apaga / las voces individuales, indefensas./ Así pues ¿qué? Las palabras elegantes se apagan pronto, / y las normales seguro que no convencen a muchos”. Estos poemas, como siempre admirablemente traducidos por Xavier Farré, se adentran en lo que huye y se esconde en el interior de lo cotidiano, en lo invisible e indivisible de los días: “Qué bello es lo extraño, qué fría la felicidad. / Se encienden luces amarillas en las ventanas sobre el Sena / (he aquí algo realmente misterioso: la vida de otras personas)”. Y se mueven a través de esos tiempos y lugares que dan refugio a la vida: el recuerdo y la infancia; las ciudades y países donde Zagajewski ha pasado su existencia, espacios entre reales y eternamente ideales, moldeados por la imaginación del viajero fascinado ante los paisajes, las cosas y los rostros de la gente, sus costumbres y quehaceres: “Pensé que las ciudades no las construyen las casas, / ni las plazas o las avenidas, los parques, las anchas calles, / solo las caras que se iluminan como lámparas, / igual que los sopletes de los soldadores que por la noche / reparan el hierro entre nubes de chispas”; la evocación de los seres queridos, presentes y desaparecidos, donde la figura del padre, ya sin memoria, es apoyo necesario en la búsqueda de lo olvidado tras el paso de los años;  los cafés, los parques y jardines, las calles y los ríos (excelentes los dedicados al Ródano y al Garona); la poesía y los poetas, seres “invisibles como los mineros, / escondidos en las excavaciones, / construyen una casa para nosotros”, y capaces de “hacerse cargo de todo el peso del mundo / y hacerlo ligero, soportable”. Un libro que tiende un puente entre la existencia diaria y la memoria, entre lo mundano y lo misterioso, lo cotidiano y lo trascendente en un lenguaje depurado y sencillo, conversacional pero eficaz en su naturalidad, gracias a la sorprendente y acechante cercanía material y terrena de sus imágenes y comparaciones. Es el brillo instantáneo de una nueva realidad que encaja mágicamente en la discursividad del poema: “ante el indiscutible encanto de una línea lograda / o de una metáfora o una imagen inesperadas, / todo quedaba -por un instante- perdonado”. Un ritmo pausado y cadencioso, el necesario para dar cuenta de esos acontecimientos extraordinarios y misteriosos en un mundo abierto que, con su mano invisible, deviene en “un paciente, silencioso himno a la vida”.

viernes, 28 de abril de 2017

UNA CERCANA LEJANÍA

Las proximidades
Concha García
Calambur. Barcelona, 2016
79 páginas. 12 euros



La trilogía que Concha García inició con Acontecimiento (2008) y continuó con El día anterior al momento de quererle (2013), alcanza su cierre en la “sabia luminiscencia” de Las proximidades. En este imprescindible libro toma cuerpo la precisa conciencia de la percepción en la proximidad detenida del instante: “Miras, como si comprendieses / que en el mirar subyace / toda la escena”. Una mirada que, a partir de la inquietud de lo próximo, se abre hacia lo(s) otro(s) desde un yo más repartido que se hace único y plural: “La prueba es / que nos atravesamos / y la velocidad no resiste / un detenerse / tan cercano”. Es el particular tejido del espacio y del tiempo en la contenida inquietud de lo que está por suceder o por llegar a ser: “el momento presente / se disuelve en el que / ya sucedió”. Poemas que dan cuenta de las densidades no medibles del tiempo, en un proceso de detenciones y miradas que perciben el mundo en todas sus dimensiones, pues las “sombras movedizas” de “la realidad se prende(n) / en varias instantáneas”.

Es una voz que, enhebrada a un cuerpo y a una vida en el tacto de la proximidad, se sostiene gracias a un yo que consigue simultáneamente percibir y ser percibido, capaz de revelar lo que es y lo que está en los instantes de lo cotidiano, un modo de proteger y tornar visible lo aparente, pues como dice el título de uno de los poemas, no hay “Nada más exuberante que la percepción de la vida”. La serena mirada incisiva de este libro levanta el velo de lo que ya estaba ahí, ese “aura” que es, como dijera Walter Benjamin, “la manifestación irrepetible de una lejanía”, por muy cercana que esté, como en este libro necesario.


Esta reseña de "Las proximidades" de Concha García, fue publicada en Babelia - El País, el sábado 18 de febrero de 2017


EN EL UMBRAL DEL MUNDO

No estábamos allí
Jordi Doce
Pre-Textos. Valencia, 2016
96 páginas. 16 euros


La escritura de Jordi Doce (en sus libros poéticos y de ensayo, de notas y aforismos, incluso en sus traducciones) es fruto de un pensamiento poético que es el reflejo de una unidad de “tono” -entendido en su sentido etimológico como el de una cuerda tensada- en la que reside la presencia y la fuerza de su poesía. En No estábamos allí, ese tono dibuja un clima y un paisaje donde “la extrañeza es una forma de atención / una distancia desnuda”. Ese cambio de relieve -que estaba presente en Perros en la playa (2011) y en Monósticos (2012), estos últimos incluidos aquí como parte cardinal de este nuevo libro- surge de una inflexión tonal que tiene ahora un acento más narrativo, dando entrada al lado imaginativo y expresionista de una mirada “donde vida y sueño se replican eternamente”. Con una lengua abiertamente concisa, más vivaz y desprendida, acaso machadianamente ingrávida y ligera, se levantan escenarios que muestran las luces y las sombras de atmósferas y momentos precisos, justo ahí, “cuando el mundo se convirtió en el mundo”.

Una vida en suspenso, un tiempo desconcertado y perplejo, con esa “luz tangente” que surge allí donde “la curva del brotar y la curva del horizonte // se confunden”. Poemas que habitan zonas de frontera, un territorio fantasmal y borroso, no tanto difuso como perturbador, entre el yo y los otros: presencias girando “en la rueda de las apariciones”. Una realidad enhebrada al misterio, entre la paradoja y la conjetura, un umbral donde “recordar cómo es el mundo cuando no estábamos en él”. Poemas inolvidables que, al filo del cuento y de la fábula, arrastran al lector hacia un universo de imágenes filtradas, como “nubes de polen a la luz oblicua de la tarde”.


Esta reseña de "No estábamos allí" de Jordi Doce, fue publicada en Babelia - El País, el sábado 11 de febrero de 2017

http://cultura.elpais.com/cultura/babelia.html